Después de comer en Agra tocaba volver a Delhi para la última cena y traslado al aeropuerto. El camino de regreso toda suerte de aventura. A una velocidad de miedo (50km/h), los 200 km que separan Agra de Delhi se hacen en cinco horas y media, porque con estos tiempos obliga una parada técnica. Tractores, motos, camiones, camellos, vacas.... gente, daba la sensación por momentos que todo el recorrido era por el centro de una ciudad. Es impresionante ver tanta gente, tantas personas. En Delhi hubo cambio de planes. En principio nos habían seleccionado un hotel de 5* cercano al aeropuerto para la cena última, pero nos llevaron a THE IMPERAL, uno de los mejores hoteles de Delhi. Sólo una palabra (o dos según se mire) IMPRESIONANTE.
Os dejo alguna foto.
(Este es el sitio donde cenamos. En la barra pusieron el buffet, sin las banquetas. Se llama 1911)
Os dejo también este vídeo que he encontrado en youtube
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